Gideon Rachman en el Financial Times tiene un artículo que coincide con lo que muchas otras personas están pensando: Wikileaks ha mejorado la opinión de internacional sobre los Estados Unidos. Contra la idea de que los americanos dicen una cosa en forma pública, mientras conspiran por otro lado, sus comentarios privados son decentes, aunque poco diplomáticos. En la mayoría de los casos las intenciones del gobierno norteamericano –o al menos del Departmaneto de Estado– son buenas y los que quedan mal son los gobiernos de otros países:
Overall, the picture of the US that emerges from WikiLeaks is positive. America’s foreign policy comes across as principled, intelligent and pragmatic. That was, perhaps, the best-kept secret of all.
Esto echa por tierra muchas teorías conspirativas sobre los Estados Unidos, salvo tal vez la de Chávez: Wikileaks es una conspiración de lso Estados Unidos.