En un almuerzo en la Conferencia Anual de Economía organizada por el Banco Central del Uruguay, Ricardo López Murphy describió una idea que alguna vez tuvo: hacer equivalente el tratamiento tributario de dividendos e intereses, eliminando la exención tributaria de los intereses pagados sobre la deuda. Lo interesante de la idea es que este tratamiento igualitario de capital y deuda llevaría a un cambio notable en la forma en que se financiarían las empresas, haciéndolas menos sensibles a cambios en las tasas de interés. Asimismo, como una fracción mayor de las obligaciones sería contingente, las empresas tendrían menos posibilidad de entrar en falla.
Es una idea interesante y valdría la pena pensar con cuidado en las implicancias y las razones pòr las que no se ha desarrollado. En todo caso, el otro extremo es el caso de las economía islámica, en que los préstamos a interés no se permiten, por lo que en principio, todas las inversiones son con capital de los socios. Convendría reflexionar sobre si un punto intermedio, en que se tratan igual dividendos e intereses, representa una combinación más eficiente que las alternativas.
Nota: La propuesta elevaría los ingresos fiscales si no se hiciera nada más, por lo que habría que ajustar las tasas para que fuera neutral en términos de recaudación.